Mamíferos mexicanos en peligro de
extinción.
La
extinción de la flora y de la fauna, de la vida silvestre, es un tema a tocar
de manera obligatoria al hablar de la globalización, ya que como se vendrá
viendo, en nuestro país esta cuestión es delicada de tocar por la importancia
de la misma es decir, México se encuentra en un lugar significativo al momento
de hablar de la extinción, que incluso se han tomado medidas a nivel
internacional para poder combatir y controlar este gran problema.
Como
se puedo notar de la lectura base del presente texto académico, la problemática
que nos trae hasta hoy no ha pasado desapercibida por el gobierno mexicano que
incluso se han tomado medidas nacionales como las Normas Oficiales Mexicanas al
igual que a nivel internacional con el Convenio Internacional de Comercio de
Especies, en los cuales entre otras cosas se establece, la regulación de las
temporadas de caza así como la caza furtiva,
con la finalidad de establecer cuales especies se encuentran en peligro de
extinción, están extintas o bien, se les otorga una protección especial por
tratarse de especies que se encuentran en una eminente amenaza.
Vaquita marina.
En la
república mexicana se encuentra 10% de las especies existentes en el planeta, de las cuales alrededor de 50% son especies endémicas, y
su existencia se limita a una determinada zona. Lo demuestran las 1,681 especies de mamíferos, las 1,054 especies
de aves –más de las que habitan en Estados Unidos y Canadá
juntas– y las 704
especies de reptiles, 51% de ellas endémicas, por tanto cabe
destacar con excepción de Australia no hay otra región en el mundo que cuente
con tantas.
Ante
una realidad que ya no puede ocultarse, el gobierno mexicano está tomando
cartas en el asunto; ya identificó las especies o poblaciones de flora
y fauna
silvestres que se encuentran en las diferentes categorías de peligro de
extinción a lo largo y ancho del territorio nacional y a partir de esta
información elaboró una serie de listados para mediante la aplicación de un
método evaluar el riesgo en el que se encuentran algunas.
Mediante la creación de leyes
la autoridad procedió a proteger a todos los “mexicanos amenazados”. La Ley
General del Equilibrio Ecológico y la Ley General de la Vida Silvestre sirven
para este propósito. Asimismo, ha definido una serie de categorías para
unificar criterios.
De acuerdo con la Norma Oficial
Mexicana, NOM-059-ECOL-2001, cuando se hace referencia al peligro de extinción
se trata de aquellas especies cuyas áreas de distribución o tamaño de sus
poblaciones en el territorio nacional han disminuido drásticamente poniendo en
riesgo su viabilidad biológica en todo su hábitat natural, debido entre otros a
factores como la destrucción o modificación drástica del hábitat,
aprovechamiento no sustentable, enfermedades o depredación.
En la NOM de 2001 se mencionan 221 animales en peligro de
extinción. Entre ellos destacan 43 especies de mamíferos, 72 de
aves, 14 de reptiles, seis de anfibios, 70 de peces y 16 de invertebrados. Cabe señalar
que la lista es un intento para aproximarse a la realidad, pues existe una
revisión continua de acuerdo con un mayor y mejor conocimiento de la flora y la
fauna de México.
Respecto
de las especies endémicas en peligro de extinción, se pueden enumerar ocho de
invertebrados, 62 de peces, cinco de anfibios, cinco de reptiles, 38 de aves y
17 de mamíferos, de acuerdo con la NOM-059-SEMARNAT-2001.
Aunque
muchos animales están protegidos contra la caza,
eso no detiene a algunas personas inescrupulosas que practican la caza ilegal
de los mismos. Esto se conoce como la caza furtiva y en muchos lugares
representa una actividad lucrativa gracias a los altos precios que tienen los
cuernos, el marfil y la piel de estos animales protegidos, entre otras partes
del cuerpo.
Incluso ante
la presencia de los guardas de caza contratados para patrullar las áreas
protegidas, los cazadores furtivos se las ingenian para ganar ventaja. Estas
zonas son extensiones de tierra muy grandes y es difícil protegerlas como se
desea. Otro inconveniente es que los cazadores furtivos que van tras la caza de
presas grandes, como elefantes y rinocerontes, emplean armas potentes y pueden
ser muy peligrosos.
La caza
furtiva no sólo ocurre en África o Asia, se conoce que actos de este tipo
también tienen lugar en Parques Nacionales. Las personas roban cactus, árboles,
tortugas. Ese es un problema frustrante para aquellos que desean proteger a las
criaturas en peligro de extinción.
¿Qué puedes hacer para
ayudar?
Hay muchas
maneras en que tú y tu familia pueden ayudar a detener la caza furtiva.
Veamos:
• Nunca
comprar, vender o poseer cualquier artículo hecho de marfil. Incluso las ventas
legales de marfil impulsan la caza furtiva. Recuerda que todo marfil representa
la muerte de un animal, ya sea un elefante o
una morsa.
• Nunca
compres coral ilegalmente para tu tanque de peces. No contribuyas con los
cazadores furtivos que extraen parte de los arrecifes de nuestros mares.
• No
mantener a los animales exóticos como mascotas,
incluso si los ves en una tienda de mascotas. El comercio de animales exóticos
no está regulado en todos los países del mundo, así que comprarlos estimula la
caza de esas especies. Lo mejor es dejar a los animales salvajes en su hábitat
natural.
• Si te has
sensibilizado con este asunto, ayuda al planeta y corre la voz.
Como
se ha dicho hasta ahora la caza furtiva, el peligro de extinción y la extinción
son temas delicados para nuestro país y de gran relevancia, pues si desaparece
una especie todo el ecosistema se modificará y sufrirá cambios irreversibles.
Es
nuestra responsabilidad como ciudadanos, como Seres Humanos cuidar la tierra y
todas las maravillas que con ella habitan (incluyéndonos) pues es el único
lugar en donde podemos habitar.
Elegí
este tema porque considero que es necesario concientizar a nuestra sociedad de
la importancia del tema, los riesgos y las perdidas irreversibles que se están sufriendo
actualmente nuestro ecosistema.
Para
iniciar en la exposición de este tema, considere importante tomar en cuenta la
legislación actual con respecto a la caza furtiva, entre otros el tema que el
presidente de la República tomo para la preservación de la vaquita marina.
Bibliografía: